Conoce a Lauren Shields, una productora artesanal que transformó su pasión por la creación en una carrera prometedora.

Soy de una pequeña ciudad de Indiana donde no hay mucho que hacer. Me interesa el arte, la moda y las cosas creativas, a las que antes no tenía acceso. Solo tenía que ser un poco ingeniosa y hacer mis propias creaciones. Así es como empezó todo.

¿Qué es un productor artesanal?

Nadie podría haber diseñado este trabajo, ¿verdad? Es un trabajo que no existía hace cinco años. Un productor ejecutivo de Making It, un programa de manualidades de la NBC, se puso en contacto conmigo y me propuso trabajar como consultora, porque estaban a punto de empezar la fase de preproducción y no sabían nada sobre ello. Me pidieron que fuera a hablar con ellos sobre algunas ideas para ver si las que habían empezado a plantear como retos eran viables o no.

¿Cómo descubriste Cricut?

La primera vez que lo descubrí fue en Making It. En realidad, no fue hasta el programa de Disney que me salvó la vida. Teníamos muchas plantillas diferentes y cosas para recortar que tenían que ser exactas. Estoy acostumbrada a hacerlo todo a mano, pero en aquel programa, habría sido realmente imposible.

¿Cómo te ayuda una máquina Cricut en tu proceso creativo?

Hay cosas que podría hacer a mano, pero nunca sería capaz de hacer el mismo volumen. Usar Cricut supone un gran cambio, ya que puedo crear mucho más, y al mismo seguir haciendo las cosas manualmente.

Lo mejor de todo es que todavía parece hecho a mano. Hace de las cosas algo único y especial. Si dibujo una forma, la incorporo a Cricut Design Space, y recorta exactamente lo que dibujé. Sin quitar nada. No hay ninguna diferencia entre mi aportación artística y el resultado con Cricut.

¿Cuándo sabes si algo va a funcionar?

Creo que depende del tipo de producto, pero hay mucha prueba y error en este tipo de proyectos, ¿verdad? Es como cuando tienes algo en la cabeza, y puede que te lleve algunos intentos fabricarlo hasta que consigues la escala correcta, la elección correcta de color y el diseño apropiado. Te sumerges en el proyecto y tienes la sensación de que se canaliza a través de ti. Es lo que más me gusta. Es lo más divertido. Resulta muy emocionante cuando ves lo que puedes hacer y el tiempo que te lleva hacerlo. Retiras la envoltura y por fin puedes ver tu creación. Es como desenvolver un regalo.